¡Hogar dulce hogar! Luego de jugar sus últimos tres partidos fuera de casa, los Patriots finalmente regresaron a Foxborough para realizar su único juego de octubre en Gillette Stadium, recibiendo a la mejor defensiva de la NFL, los Browns de Cleveland.
Pero ojo para la escuadra de Nueva Inglaterra que llegaba a este encuentro en primer lugar de su división y ganando cuatro juegos consecutivos, mientras que los Browns solo habían conocido el triunfo en dos de sus siete compromisos esta campaña. A pesar del buen momento por el que atraviesan, los Patriotas sabían que debían tener mucho cuidado con este duelo porque era uno de esos partidos conocidos en inglés como un “trap game”, o “juego engañoso“ donde en papel o en los pronósticos apunta a ser una victoria para el equipo superior, pero en realidad sería un partido complicado para los de casa.
Complicadísimo porque Cleveland, aunque el récord no lo indique, cuenta con una defensiva élite y una de las más temibles en toda la liga, la cual es comandada por el Jugador Defensivo del 2023 Myles Garrett.
Justo como era de esperarse, la defensa de Cleveland le provocó muchos problemas a Drake Maye y a la ofensiva de los Pats. La ardua defensa de los Browns derribó a Maye en cuatro ocasiones en la primera mitad (seis en total) y lo interceptaron una vez. Los únicos puntos de Nueva Inglaterra llegaron cortesía del pateador venezolano Andy Borregales que cada vez luce más cómodo y seguro de sí mismo, y este concretó tres goles de campo, sumando así los 9 puntos totales en la primera mitad para los Patriots que en la defensiva le jugaron al tú a tú a los visitantes y se fueron al descanso, arriba 9-7.
Segunda mitad, historia totalmente diferente. Los ajustes hechos por Mike Vrabel en el medio tiempo funcionaron a la perfección y en cuestión de minutos la ofensiva de los locales pasó de noche a día. Un touchdown de siete yardas de Maye a su ala cerrada favorito Hunter Henry comenzó la ampliación de lo que se convirtió en un tumultuoso marcador. Minutos después, Maye conectó un corto pase con Stefon Diggs para su primera anotación con el uniforme de los Patriotas. Y luego un bombazo de 39 yardas para Kayshon Boutte antes de terminar el tercer cuarto puso a los Patriots adelante de una vez por todas.
Por su parte, la defensiva de Nueva Inglaterra siguió luciéndose y jugando muy bien en la segunda mitad. Los Browns finalmente lograron otra anotación hasta el último cuarto, cuando el marcador ya estaba fuera de alcance.
32-13 el marcador final y la escuadra de Foxborough continúo sumando triunfos, su quinto en fila y sexto de la temporada (6-2) pero esta vez ante sus aficionados y en su hogar dulce hogar. Mismo lugar donde el próximo domingo buscará su séptimo triunfo de la temporada cuando reciben a los Falcons de Atlanta.
