El Real Madrid volvió a la senda del triunfo gracias a una actuación destacada de Kylian Mbappé, quien anotó sus primeros dos goles con el equipo merengue en la liga española, asegurando una victoria crucial ante el Real Betis. Esta victoria llega en un momento clave para los blancos, que han mostrado un rendimiento irregular en las últimas jornadas y necesitaban un golpe de autoridad para recuperar confianza y credibilidad.
El equipo dirigido por Carlo Ancelotti comenzó el partido con un planteamiento ofensivo, alineando un 4-3-3 en el que Tchouaméni actuaba como pivote, acompañado por Ceballos y Valverde en el centro del campo. Desde los primeros minutos, el Madrid intentó imponer su ritmo, pero el Betis, bien organizado en defensa, logró resistir y hasta generó algunas ocasiones peligrosas que encendieron las alarmas en el Bernabéu.
El primer tiempo del encuentro fue una mezcla de frustración y desaprovechamiento de oportunidades para el Real Madrid. La falta de precisión en el último pase y la ausencia de contundencia en el área rival parecían condenar a los blancos a otro partido sin brillo. Mbappé, Vinicius y Rodrygo no lograban conectarse ni generar peligro real ante la portería defendida por Rui Silva.
Sin embargo, el segundo tiempo trajo consigo un cambio en el guion del partido. La entrada de Brahim Díaz aportó la chispa que tanto necesitaba el equipo. Fue entonces cuando Mbappé, hasta ese momento ausente en la lista de goleadores, apareció con su magia. Un excelente pase de tacón de Fede Valverde fue aprovechado por el francés para abrir el marcador con un remate preciso que finalmente rompió la resistencia del Betis.
Este gol despertó al equipo y al estadio. Mbappé, que había llegado al Madrid con la expectativa de ser la nueva gran estrella, empezó a demostrar por qué Florentino Pérez apostó fuerte por él. Su segundo gol llegó desde el punto de penalti, después de una falta cometida sobre Vinicius en el área. Mbappé no falló, convirtiendo la pena máxima con seguridad y consolidando su papel de protagonista en la noche madrileña.
La importancia de esta victoria va más allá de los tres puntos. Marca un antes y un después en la temporada del Real Madrid, que ahora se acerca más al líder Barcelona y se reafirma como contendiente en la lucha por el título. Además, el equipo mostró una mejoría en su juego, especialmente en la segunda mitad, lo que podría ser un indicativo de que Ancelotti está encontrando la fórmula para maximizar el potencial de sus jugadores.
Por su parte, el Real Betis demostró ser un rival digno, plantando cara y resistiendo durante buena parte del encuentro. Sin embargo, la calidad individual de los jugadores del Real Madrid, especialmente la de Mbappé, hizo la diferencia en momentos clave.
Ahora, el Real Madrid debe mantener esta intensidad y continuar mejorando si quiere mantener viva la lucha por el título. Con un Mbappé que parece haber encontrado su ritmo y un equipo que comienza a mostrar signos de cohesión y fuerza, las expectativas de los aficionados están más altas que nunca.
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